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100 AÑOS DE LA UNAM

Lorenzo Reyes Mar
23 de Septiembre de 2010




El 22 de septiembre de 1910, Justo Sierra encabezó la inauguración de la Universidad Nacional Autónoma de México, heredera de la Real y Pontificia Universidad de México, la cual contaba ya con 150 años de historia y acumulación de cultura y conocimiento.

Con una integración de seis escuelas nacionales y diez entidades de investigación, la UNAM abrió sus puertas en 1910, albergando a tan solo mil 969 alumnos y 378 docentes, con sus principales sedes en el centro de la Ciudad de México.

A la fecha, la máxima casa de estudios de México, cuenta con 13 facultades, cinco unidades multidisciplinarias, cinco escuelas, 14 planteles de bachillerato y una planta de alrededor de 35 mil 57 profesores que comparten conocimiento a más de 314 mil 557 estudiantes.

Siendo nombrada como patrimonio cultural de la Humanidad, la UNAM ha sido reconocida a nivel mundial por sus aportaciones científicas, educativas y culturales que emanan de sus 29 institutos y 16 centros de investigación.

Ha sido fuente de conocimiento y creadora de los más ilustres personajes de la ciencia, cultura y las artes de México y América Latina, como Alfonso García Robles, Nobel de la Paz en 1982; Octavio Paz, Nobel de Literatura en 1990, y Mario Molina, Nobel de Química en 1995, por mencionar tan solo algunos.

LA Universidad Nacional Autónoma de México también es creadora de al menos 8 mil proyectos de investigación en diversas áreas de estudio, produciendo alrededor del 34% de artículos científicos escritos por mexicanos registrados en el International Science Indicators.

El 22 de septiembre de 1910, siendo Presidente Porfirio Díaz, se inauguró la Universidad Nacional de México, luego de que Justo Sierra Méndez, presentara la ley constitutiva de la flamante institución.

El primer Rector de la Universidad Nacional fue el abogado Joaquín Eguía Lis, quien permaneció al frente de la misma hasta 1913, en una época de enorme turbulencia política.

Ya en 1921, José Vasconcelos, Rector de la Universidad Nacional de México en ese momento, ideó y creó el escudo y el lema de la UNAM que hoy en día continúan generando sublimación en la población.

El escudo posee la característica de contener un mapa de América Latina con la leyenda “Por mi raza hablará el espíritu” el cual es sostenido por una águila y un cóndor los cuales descansan en una alusión de los volcanes y el nopal de los aztecas.

José Vasconcelos, autor de la frase, tomo la Rectoría en 1920 cuando se inició la Reforma Universitaria Latinoamericana, en tiempos en los cuales las esperanzas de la revolución en México estaban latentes y existía una enorme fe en el país y en el ánimo de redención que se propagaban en el ambiente.

En 1929, durante la presidencia de Emilio Portes Gil, la Universidad obtuvo su autonomía e igualmente se autorizó la construcción de una nueva sede, la Ciudad Universitaria, que sería inaugurada en 1954 durante el gobierno de Miguel Alemán Valdés -y que en 2007 quedó inscrita por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), como patrimonio cultural de la humanidad.

La autonomía implica el autogobierno, y la no intervención del poder político en la elección de las autoridades universitarias, dotando asimismo a la institución de la capacidad decisoria sobre sus estatutos y programas de estudio.

Un tema no menos importante es que la autonomía también involucra la inviolabilidad de las instalaciones universitarias por parte de las fuerzas de seguridad, tema espinoso a propósito de los lamentables sucesos de 1968, incluyendo asimismo el sitio de Ciudad Universitaria por parte de las fuerzas armadas en la inauguración de los Juegos Olímpicos.

A cien años de fundada, la UNAM se enfrenta a la necesidad de realizar cambios significativos. Uno de los más importantes debería ser, a mi juicio, el logro de un vuelco en las prioridades, para fortalecer principalmente los postgrados y la investigación.

Tradicionalmente se ha creído que las reformas deben comenzar desde abajo, por los bachilleratos y las licenciaturas.

Creo que no es lo más adecuado: estoy seguro de que hoy hay que invertir las prioridades para lograr que los más altos niveles se conviertan en potentes locomotoras de la universidad.

Es menos difícil reformar la cabeza del cuerpo universitario que cambiar sus pies. Es mejor concentrar esfuerzos en la parte más pensante y mejor preparada. Si los cambios son exitosos, seguramente se extenderán por todo el cuerpo universitario.

En contraste, la UNAM ha aportado a la sociedad mexicana, valiosos recursos humanos, los que a través de la investigación, el desarrollo científico y tecnológico y la reflexión, incidieron y lo siguen haciendo, en el progreso nacional. ¡Felicidades a la UNAM y a todos los universitarios, en su primer centenario!

Como egresado de la Facultad de Filosofía y Letras de esta institución, me siento muy orgulloso de seguir participando en el desarrollo económico del país, ya que la Universidad te otorga los conocimientos básicos, pero depende de cada quien seguirse preparando y actualizando para seguir siendo competitivo en el terreno que te desempeñes.


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Escenario Político

Por Lorenzo Reyes Mar
07 de Septiembre de 2010



Tras rendir su quinto informe ante el congreso local y escuchar las posiciones, críticas y cuestionamientos de los partidos de oposición, el gobernador priísta del estado de México, Enrique Peña Nieto, dirigió un mensaje en el que advirtió que si bien la delincuencia se ha convertido en una grave amenaza para el país, enfrenta otra: la lucha del poder por el poder mismo, al negociarse alianzas entre proyectos antagónicos, que desvirtúa la democracia y generan confusión y desconfianza en la política.

Desde un atiborrado teatro Morelos de Toluca, lanzó un mensaje directo al presidente Felipe Calderón cuando señaló que “no se puede convocar a la unidad de propósitos y, al mismo tiempo, actuar por consignas e intereses electorales”.

Y también con estos cuatro señalamientos:

-“Seamos claros, el poder por el poder mismo es una forma de autoritarismo, tiende a reducir las opciones de la gente y lesiona el espíritu de la democracia.
-“Igualmente autoritario es caer en la tentación de usar las instituciones públicas para fines particulares o partidistas.

México ya vivió una transición política, los mexicanos dimos un paso decisivo a la pluralidad, con plena competencia y reglas iguales para todos.

-“Si los partidos contribuyeron y participaron en esa transición, no se puede excluir ni descalificar a ninguno de ellos. Es falaz y doloso hacer creer que la llegada de un partido distinto al que actualmente ostenta la Presidencia de la República sea una regresión de nuestra democracia.

“Desterremos los reclamos y recriminaciones al pasado. Vamos hacia delante para tener rumbo y superar la parálisis, el proyecto de futuro no pasa por la restauración del viejo régimen”.

Dijo, por ejemplo, que de 2000 a 2009 -de gobiernos panistas, México registró el crecimiento más bajo de las últimas ocho décadas de las administraciones priístas; que de 183 países, ocupamos el lugar 157 en crecimiento acumulado y que ya no pertenecemos al grupo de las 10 economías más grandes del mundo, mientras que en competitividad pasamos del lugar 42 al 60 y que las tasas de desempleo se han duplicado y los mexicanos en pobreza suman más de 50 millones, la mitad de la población.

En el desempeño interior como en política exterior, no se ha podido evitar que México quede rezagado y pierda liderazgo, particularmente en América Latina y que haya voces que, incluso, descalifican al país, considerándolo un Estado fallido.

Peña Nieto dijo que él no comparte tal calificativo al considerar que “es más bien la falta de acuerdos y el aplazamiento de decisiones fundamentales lo que ha provocado la ausencia de logros trascendentes, el Estado Mexicano ha sido y es sólido por su historia y por sus instituciones”.

Tambien expresó que en la actual circunstancia, las fuerzas criminales atentan contra la estabilidad, la ley y el estado de derecho y se han convertido en enemigos de la tranquilidad y la vida cotidiana de los mexicanos, pero que no es el único riesgo que enfrenta el país ante la otra grave amenaza de la lucha del poder por el poder mismo, que desvirtúa la democracia, al gobierno y a sus instituciones porque “se promueve así una democracia sin contenido, donde por el sólo fin de obtener el poder se negocian alianzas entre proyectos antagónicos, generando confusión y desconfianza en la política”.

Previamente Peña Nieto dio cuenta de toda una serie de logros entre los que destacan la inversión que por más de 900 millones de pesos realizó su gobierno en vehículos, equipamiento tecnológico, capacitación y operación de los sistemas de seguridad pública en el estado.

En el área de comunicaciones enlistó la construcción de 9 autopistas, un viaducto, 8 carreteras y una serie de puentes y pasos a desnivel.

Del aeropuerto internacional de Toluca dijo que ha consolidado su remodelación y modernización para atender ahora 13 millones 500 mil pasajeros al año.

Entre 500 obras (del “te lo firmo y te lo cumplo”) menciono nueve autopistas de casi 400 kilómetros –incluido el Circuito Exterior Mexiquense y el Viaducto Bicentenario- la mecanización del campo (6 mil tractores) y 18 mil programas agropecuarios, como la multiplicación nunca vista de centros universitarios a Ciudades Dormitorio, entre otras.

Los hermanos, los hijos y la mamá (profesora retirada, Ofelia Nieto Sánchez) dibujaron el sentir del peñismo, con una sonrisa que jamás dejaron, hasta abandonar la Plaza de los Mártires, nunca tan resguardada.

Durante su entrega del quinto informe al Congreso estatal, Peña escuchó a los representantes de las 8 fracciones parlamentarias y a todos ellos les dijo que efectivamente su gobierno no sólo expone los logros alcanzados, sino que reconoce los rezagos y los problemas que viven los mexiquenses.

En la primera fila del Teatro Morelos le escucharon los gobernadores Fernando Ortega Barnés, de Campeche; Humberto Moreira, de Coahuila; Mario Anguiano, de Colima; José Reyes Baeza, de Chihuahua; Ismael Hernández Derás, de Durango; Miguel Ángel Osorio Chong, de Hidalgo; José Calzada, de Querétaro; Félix González Canto, de Quintana Roo; Fernando Toranzo, de San Luis Potosí; Jesús Aguilar Padilla, de Sinaloa, Ivonne Ortega, de Yucatán; Mario Marín, de Puebla; Ulises Ruiz, de Oaxaca y Rodrigo Medina , de Nuevo León. No asistieron Fidel Herrera, de Veracruz; Ney González, de Nayarit; Eugenio Hernández Flores, de Tamaulipas.

Estuvo el hombre más poderoso del país, después de Felipe Calderón, José Francisco Blake, como emisario presidencial.

En medio de Beatriz Paredes y del coordinador de los diputados federales del PRI, Francisco Labastida, estuvo el expriísta Marcelo Ebrard, Jefe de Gobierno del Distrito Federal. Por ahí estuvieron también Manlio Fabio Beltrones y el excandidato presidencial del tricolor, Roberto Madrazo.

En la segunda fila estuvieron los gobernadores electos de Veracruz, Javier Duarte; Carlos Lozano, de Aguascalientes; César Duarte, de Chihuahua; Jorge Herrera Caldera, de Durango; Francisco Olvera, de Hidalgo; Elpidio Torre Cantú, de Tamaulipas; Mariano Gonzàlez Zarur, de Tlaxcala y Miguel Alonso Reyes, de Zacatecas.

Si el mandatario mexiquense se mantiene con la amplísima ventaja que le dan todas las encuestas de opinión entre los prospectos del PRI para la candidatura presidencial de 2012, tiene la oportunidad de ser una firme opción para miles de jóvenes que aspiran a tener un mejor gobierno que cumpla lo que promete.



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