Petroleos Mexicanos continúa siendo la principal fuente de divisas para el país, y el principal aporte de recursos del fisco mexicano cada año y no tiene capacidad para asegurar su propio presupuesto operativo.
Un documento de la Secretaría de Hacienda reveló que nueve de cada diez pesos provenientes de los impuestos y aprovechamientos pagados por Petróleos Mexicanos (Pemex) al gobierno federal desde enero a noviembre de 2010, fueron destinados a pagar intereses, comisiones y gastos de la deuda, así como a participaciones a los estados y municipios, y para compensar el balance en adeudos de ejercicios fiscales anteriores, entre otros.
En tanto, los informes oficiales revelan que los ingresos presupuestarios aportados por Pemex al sector público ascendieron a 861 mil 574 millones de pesos entre enero y noviembre de 2010, cifra para lo que se utilizaron $318 mil 183 millones, para sostener la operación de la paraestatal.
Mientras que los restantes 543 mil 400 millones de pesos fueron trasferido al gobierno federal en forma de impuestos, derechos y aprovechamientos.
Estas aportaciones representaron 91.3 por ciento de los 595 mil 250 millones de pesos que se asignaron al gasto no programable del sector público entre enero y noviembre del año pasado, informó la Secretaría de Hacienda.
Pemex, no tiene dinero para dar mantenimiento preventivo a sus instalaciones y carece de recursos para ampliar sus trabajos de refinación, explotación y exploración.
Tanto Juan José Suárez Coppel, Director General de Pemex, como el líder del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps, coincidieron en un foro organizado por un periódico de circulación nacional, donde se analizó la actual situación de la empresa.
Ambos hicieron un llamado a que Pemex en verdad sea apoyado desde el gobierno federal, cuyos reguladores poco se han preocupado en el pasado por atender sus necesidades de fondo, pero también por los gobiernos estatales, el Congreso de la Unión e incluso por la sociedad civil.
Hay activos petroleros capaces de suplir la previsible declinación de Cantarell, el principal generador de crudo del país, tanto en la Cuenca del Sureste, como en aguas profundas.
Sin embargo, para llegar a una explotación masiva y constante de dichos pozos, se requiere mucho dinero para las fases previas del proceso.
También se requerirán muchos más recursos para extraer, transportar, procesar, exportar y refinar el hidrocarburo.
Suárez Coppel precisó que la paraestatal no tiene la capacidad para asegurar su propio presupuesto operativo, ya que este año tienen 40% del gasto de operación que necesitan, por lo que no existe la certeza de tenerlo en el futuro.
Asimismo, reconoció que en el 2010 tuvieron pérdidas por 50 mil millones de pesos en refinación y petroquímica ya que todos los subsidios de gas LP, los cuales fueron más de 25 mil millones de pesos, los pagó la paraestatal.
Además, alerto que si no se asegura el suministro de combustibles en México, en el futuro se importará 75% de las gasolinas que se consumen; actualmente se importa 45%.
Por ejemplo hablo de la expansión y la modernización de la Refineria de Minatitlán, la tercera instalación en ser renovada, que elevará la capacidad de refinación local en 150 mil barriles por dia, a 335 mil barriles por dia, cuando comience a operar.
Añadió que la producción en 2010 fue de 2 millones 579 mil barriles diarios, aunque la producción de Cantarell se estabilizó.
Enfatizó que México tiene un gran potencial por explorar, ya que, en la actualidad, hay 10 años de reservas probadas, pero son 30 años de recursos recuperables y el 70% está en aguas profundas.
El director de la paraestatal mencionó que 85% de las reservas probadas se ubican en la Cuenca del Sureste, Tabasco, aguas someras y un poco en aguas profundas.
Las reservas probadas son las cantidades de petróleo que, por análisis de datos de geología e ingeniería, pueden ser estimadas con "razonable certeza" que serán recuperables comercialmente, a partir de una fecha dada, de reservorios conocidos y bajo las actuales condiciones económicas, métodos de operación y regulaciones.
Agregó que en Cantarell se debe recuperar cuando menos 50% del recurso petrolero que está en la zona, mientras que para Chicontepec, el estimado de reservas recuperables es significativamente menor a 1
Las Reservas recuperables. son la proporción de hidrocarburos que se puede recuperar de un yacimiento empleando técnicas existentes.
Se prevé fortalecer en campos con reservas probables sustanciales como Ku Maloob Zaap, en la Sonda de Campeche, así como en los proyectos de Chicontepec, Crudo Ligero Marino y los campos recién descubiertos Ayatzil, en la sonda de Campeche, y Tsimin, en Tabasco.
Las Reservas Probables, son el estimado de las reservas de aceite y/o gas en base a estructuras penetradas, pero requiriendo confirmación más avanzada para podérseles clasificar como reservas probadas.
Pemex afirmó que con estos descubrimientos, a partir de 2013 podra detenerse la caída en las reservas probadas de crudo, lo que evitara también la caída de las ventas.
Las Reservas probadas, son la cantidad de aceite y gas que se estima recuperable de campos conocidos, bajo condiciones económicas y operativas existentes.
Por su parte la falta de recursos para mantenimiento obliga a Petróleos Mexicanos a parar sus plantas por cuatro meses al año, informó Carlos Romero Deschamps, secretario del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana.
El líder sindical reconoció, que la ola de inseguridad que vive México no deja fuera a los petroleros, los cuales han sufrido levantones, secuestros, asaltos y desapariciones.
Cadereyta, Nuevo León, Tabasco, Tamaulipas y Ciudad del Carmen, Campeche, son los principales sitios donde la delincuencia organizada ha sometido a los empleados de Pemex. Añadió que si la empresa petrolera contara con recursos para tener un mantenimiento normal, las diversas plantas pararían solamente el tiempo necesario para ser atendidas.
“A veces trabajamos con las uñas, pero no tenemos los elementos necesarios”, enfatizó Romero Deschamps, quien es líder de 100 mil trabajadores petroleros en el país.
Para concluir, ofrezco mis respetos y admiración al periodista Atila, autor de la columna “Lo que se dice”, del periódico “El Dictamen”.
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